Gran tarde de fútbol la que han disfrutado los aficionados del Wigan que acudieron al DW Stadium a animar a su equipo. Los de Roberto Martínez recibían a un Newcastle arrollador que había conseguido colocarse cuarto y que se empezaba a creer sus opciones reales de jugar la Liga de Campeones la próxima campaña. Por su parte, los locales necesitaban la victoria para situarse por encima del descenso debido a que se encontraban empatados a puntos con el Bolton, equipo que ocupa la última plaza de los tres puestos de abajo.
El equipo local salió muchísimo mas metido en el partido y no tardó en llegar el primer gol de la tarde, una gran jugada por banda derecha acabó en un centro al punto de penalti que Victor Moses ponía fuera del alcance del guardameta Krul, era el minuto 11 y el Wigan abría la lata de un partido que le iba a resultar mucho más cómodo de lo que todo el mundo podía esperar.
Sin tiempo para reponerse, las "urracas" recibían el segundo sólo 3 minutos después, una jugada, esta vez por banda izquierda, acababa en un mal despeje del internacional argentino Fabricio Coloccini que aprovechaba Moses para anotar su segundo gol del encuentro.
El Newcastle lo intentó minutos después pero estaba claro que hoy no era el día, sólo una falta cerca de la escuadra derecha lanzada por Ben Arfa fue lo único reseñable antes de que los de Roberto Martinez anotaran el tercero. Una enorme jugada al primer toque fue culminada por el escoces Maloney causando el delirio en las gradas del DW Stadium.
Cuando la primera parte llegaba al final, apareció el italiano Franco di Santo para deleitarnos con la obra de arte de esta tarde, un remate sutil desde la frontal que se colaba por la escuadra derecha del portero Krul que no sabía dónde meterse, era el cuarto gol en menos de 45 minutos y la gran sorpresa del día de hoy estaba consumada.
En la segunda parte los hombres de Alan Pardew lo intentaron por todos los frentes pero ni Demba Cissé que se encontró con el larguero, ni el francés Ben Arfa fueron capaces, ni siquiera, de anotar el conocido "gol del honor". El partido remataba con el 4-0 con el que se llegara al descanso y se convierte en un gran empujón en las aspiraciones de los locales en la lucha por la salvación, y un pequeño accidente que le puede salir muy caro a las "urracas" en sus aspiraciones por escuchar la próxima campaña el himno de la Champions.
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